lunes, 16 de septiembre de 2013

Melancolía


Tengo miedo de despojarme de este amanecer adherido a mi piel, de abrir mis ojos y mirar el  feo rostro del mundo descubierto por la luz día. No me gusta lo que ven más allá del rojo de la aurora y las madrugadoras olas que me acariciaban en la playa. Hubiera querido que ese momento, durara un poco más, que el instante no se apagara a la misma vez que se encendía el mundo.

El tiempo y el mundo , tiranos aliados, desoyen mi petición de prolongar un poco más ese instante. Antes, solían ser más benévolos, o yo más fuerte, y permanecía soñando un rato algunas horas más.

Mi mirada apenas conserva ya algo de inocencia y miro con tristeza las falsas compañías con las que disfrazaba mi soledad. Y al verlas pasar, recuerdo las palabras del inigualable Pessoa: estoy tan solo, que noto la distancia entre mi traje y yo.

El mundo no me ofrece ya alimento para el espíritu.  Salgo a buscarlo  allá dónde se encontraba, pero muchas veces es en vano. En otras ocasiones,  atisbo algo que se parece: en el aspersor que travieso salpica mi espalda, en el tacto de la hierba en mis pies desnudos, en las olas de la playa, en  la sonrisa de quienes quiero, pero es tan rauda su visión, que apenas alcanzo a abrazarlo y frustrada regreso al lugar de donde salí, y abrazo tristes sucedáneos.

La realidad, la mirada fea del mundo, suicida poco a poco todo aquello que hacía que amara el mundo a pesar de todo, y que de alguna manera le daba sentido.

Y dirás, que todo pasa. Bueno, quizá. Pero ¿y si es tarde?

Nunca diría que el aire podía llevar sobre su espalda  tantas piedras. Nunca pensé que olvidaría como tirarlas.
 
 

 Óleo de Oscar Tusquets

3 comentarios:

  1. A los buenos días:

    Cada día elegimos. Lo hacemos de seguido sin tenerlo en cuenta. Igual, digo yo que, si fuésemos capaces de elegir conscientes, adquiriendo ese hábito se puede ser feliz, cosa que también es una opción.

    Iré a conseguir que mis palabras funcionen, aún me queda mucho por hacer.

    Cienes de besitos pal andando y cienes de y pico de abrazos.
    Shi

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  2. Nunca es tarde, solo hemos de estar preparados para cuando llegue ese día, aunque es dificil mantener los sueños en pie cuando parece que todo se desmorona a nuestro alrededor.
    La soledad es una asesina a sueldo que no se apiada de nadie, que te hipnotiza con su mirada y de la que es complicado escapar.
    Solo nos queda luchar ¿acaso hay algo mejor a lo que dedicar el resto de nuestras vidas?

    Besin

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  3. Ay Ola inmensa!!..qué poeta tan sincera eres!!
    La frase de Pessoa es tremendamente real y por sí cruel,pero debemos de darnos el beneficio de la esperanza,porque la hay.Y si yo lo creo...es que la hay!!
    Besucos corazón.
    Volviendo pausadamente

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